Mi nombre es Indira Cortés y tengo veintitrés años de experiencia para sumar a este mundo. Considero que soy una persona bastante extrovertida y simpática, sin olvidar ese toque mandón y el exceso de organización que llego a tener a veces. Pienso que pertenezco a todos lados y de ninguno en concreto, aunque siempre seré extremeña, y con orgullo. También añado una curiosidad, y es que mi animal preferido siempre ha sido el elefante, a parte de por la simbología que tiene para mí de forma personal, porque soy una persona muy paciente y fuerte ante las adversidades.
Pasé una época complicada en la que abandonar bachillerato me hizo crecer a los ojos de todos, pero sobre todo ante los míos. El Ciclo de Grado Medio de Atención a Personas en Situación de Dependencia ha sido lo mejor que esta vida pudo brindarme, ofreciéndome compañía maravillosa y una formación que me ayudaría a orientar mis preferencias. El Ciclo de Grado Superior de Integración Social fue mi gran e inesperado descubrimiento, con tan sólo tres meses de prácticas decidí cuál sería mi futuro, y gracias a ello puedo decir que actualmente estoy enamorada de mi trabajo, algo que en esta sociedad es poco común.
Curiosamente me siento identificada con "ser una hoja movida por el viento" por mis vaivenes con respecto a los estudios, aunque ese viento siempre sabe conducirme hasta el mejor y más deseado final, por eso me encuentro cursando el Grado en Educación Social.
Con respecto al título de mi blog, tengo que hacer la gran mención de honor a mi hermana. Siempre he sido una persona que ha dejado mil cosas a medias por culpa de la inseguridad y poca confianza que he tenido en mi forma de hacer las cosas, y esto me ha llevado a arrepentimientos grandes. Mi hermana Adara está en segundo de bachillerato, el gran bache de casi todos, y su forma de no perder la fuerza ha sido llenar de posits una de las paredes de su habitación con frases que, tanto personas importantes para ella como autores que le gustan, han dicho o escrito. Recuerdo que entré y estuve leyendo todas y cada una de las frases, pero "confía en el proceso" me recordó esa parte insegura de mí en algunos momentos, y la verdad es que ahora es una de mis frases motivadoras para no abandonar, así que gracias.
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